El Gran mandamiento nos ordena amar a Dios y al prójimo. Parte del caminar diario de un cristiano es reflejar el amor de Dios en su vida y en la forma de relacionarse con las personas que lo rodean.
En el Tema # 2 aprendimos que el amor no es un sentimiento. Es algo que uno hace. Crea los sentimientos. Produce emociones enormes. Pero el amor no es un sentimiento; es acción. Es una creencia que pone en su conducta.
La Biblia dice que el amor es la bondad en acción. Entonces, ¿Qué es la bondad? La bondad es el amor en acción.
La vida parece un camino, en el cual nos cruzamos con muchas personas. Algunas dan la impresión de estar satisfechas, alegres, felices; gozan de buena salud y parece que lo tienen todo y que todo les llega fácilmente. Otras lloran, sufren; y como el sufrimiento no siempre se ve. Por eso DIOS nos da la oportunidad de demostrar su amor a los heridos en la vida.
Sabemos que vivimos en tiempos difíciles y que por la Palabra de DIOS se nos advierte de los engaños y desengaños; pero la culminación de esto es: “debido al aumento de la iniquidad, el amor de muchos se enfriará.” Mateo 24: 5,10-12.
No debemos permitir que este espíritu de indiferencia enfríe nuestro “primer amor” hacia DIOS y hacia nuestro prójimo.
Jesús comparte una historia como ilustración para enfatizar que la bondad es el amor en acción, porque muchos religiosos olvidaron lo más importante en la relación personal con DIOS, que debían de ser bondadosos como el Padre Celestial.
Ante la pregunta de un escriba Jesús cuenta la historia de tres hombres que tomaron el camino de Jerusalén a Jericó, el cual era un camino de mala fama, conocido por sus asaltantes y ladrones. Ahora prestemos atención: “todos encuentran la escena de un crimen.” Y aquí es en donde se desarrollan: Las Tres Actitudes.
Cada uno de estos hombres responde de una forma diferente. Jesús dice que estos tres hombres representan tres escogencias en la vida. Usted va a vivir su vida con una de estas tres actitudes hacia las personas a su alrededor, aun que no los conozca, especialmente a la gente necesitada.
PRIMER ACTITUD “Mantengo mi distancia”
Cierto hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de salteadores, los cuales después de despojarlo y de darle golpes, se fueron, dejándolo medio muerto. Por casualidad cierto sacerdote bajaba por aquel camino, y cuando lo vio, pasó por el otro lado del camino. Lucas 10:30-31
En los USA, esta es una actitud muy fácil de adoptar. Se puede encontrar un camino de ida y vuelta de la casa al trabajo sin cruzarnos con la gente necesitada. Esto es a lo que se le llama un estilo de vida evasivo o Mantengo Mi Distancia. Nunca se le acerque mucho a la gente porque puede que le pidan ayuda. No se acerque mucho a la gente porque puede que lo necesiten.
Este tipo va por este camino. Ve a un hombre que ha sido golpeado, robado y dejado medio muerto al lado del camino y dice, “Mantendré mi distancia y continuaré con mis asuntos al otro lado del camino.”
SEGUNDA ACTITUD “Curioso pero sin involucrarme”
Del mismo modo, también un levita, cuando llegó al lugar y lo vio, pasó por el otro lado del camino. Lucas 10:32 Una versión dice: pasó sobre él, lo miró tirado y se cambió de lado.
Un levita no era un vendedor de Levi’s. Era un asistente del Santuario. Este tipo es el peor. Mira a este hombre que ha sido asaltado, tirado en el suelo, golpeado y medio muerto, desnudo, desangrando y después de mirarlo curiosamente, se cruza al otro lado del camino y sigue su viaje.
Queremos ver pero no nos paramos. Esta es la actitud del “Curioso Pero Sin Involucrarme”.
TERCER ACTITUD: “Trato a otros a como quiero que me traten”
Por último llegó un samaritano, que iba de camino; este vio al hombre tendido en la tierra y se sintió movido a compasión. Lucas 10:33
Si quiere crecer en el amor- y esto es de lo que estamos enseñando en 50 días de Amor, cómo construir relaciones auténticas- por eso tendremos que adoptar el estilo de vida de la bondad. “Tratar a los demás como quisiera que me traten a mi”
Este samaritano hizo cuatro cosas que necesito hacer, que usted necesita hacer, que todos los cristianos necesitamos hacer, si queremos ser más bondadosos, más amorosos.
¿QUE PUEDO HACER PARA SER MÁS BONDADOSO? El samaritano hizo cuatro cosas que necesito hacer, que usted necesita hacer, que todos necesitamos hacer si vamos a aprender a ser más bondadosos, más amorosos.
1. COMIENZO A VER LAS NECESIDADES DE LAS PERSONAS A MI ALREDEDOR.“Cuando él vio la condición del hombre, su corazón se dirigió a él”. Lucas 10:33b (EM)
“No debemos buscar tan sólo nuestro propio bien, sino también el bien de los demás”. 1 Corintios 10:24 (Cast.)
“La persona que siembra el egoísmo, ignorando las necesidades de otros, ignorando a Dios, recogerá una cosecha de malas hierbas. ¡Todo lo que tendrá para mostrar de su vida serán malas hierbas!” Gálatas 6:8ª
2. SIMPATIZO CON EL DOLOR DE LA GENTE. “…este vio al hombre tendido en la tierra y se sintió movido a compasión”. Lucas 10:33b (Cast.)
“Compartid, pues, vuestras cargas y problemas, obedeciendo así el mandato de nuestro Señor.” Gálatas 6:2 (Cast.)
“Cuando tenemos dificultades, o cuando sufrimos, Dios nos ayuda para que podamos ayudar a los que sufren o tienen problemas”. 2 Corintios 1:4 (BLS)
3. APROVECHO LAS OPORTUNIDADES PARA SER BONDADOSO. “Arrodillándose al lado de él, el Samaritano curó sus heridas con medicina y les puso vendas”. Lucas 10:34ª (NLT)
“Nunca te marches de alguien que se merece ayuda; tu mano es la mano de Dios para esa persona. Nunca le digas a tu vecino: “Tal vez en otra ocasión” o “prueba mañana” cuando el dinero esta en allí en tu bolsillo.” Proverbios 3:27 (EM)
“
Aquí hay una sencilla, regla general de comportamiento: Pregúntate a ti mismo, que es lo quieres que la gente haga por ti, entonces toma la iniciativa y hazlo para ellos. Agrégale la ley de DIOS y los profetas y esto es lo que vas a obtener”. Mateo 7:12
4. PAGO LO QUE CUESTE “Entonces él puso al hombre en su propio asno y lo llevó a una posada, donde lo cuidó. Al día siguiente le entregó al dueño dos monedas de plata y le dijo que cuidara del hombre. ‘Si la cuenta sale más que esto,’ él dijo, ‘pagaré la diferencia la próxima vez que esté aquí.’” Lucas 10:34b-35 (NLT)
“Si alimentas al hambriento y cuidas de las necesidades de los que sufren, entonces tu luz brillará en la oscuridad. El Señor siempre te guiará y El satisfacera tus necesidades en lugares áridos…¡Serás como un manantial que nunca se seca!” Isaías 58:10-11 (NCV)
“Tu propia alma se vigoriza cuando eres bondadoso”. Prov. 11:17 (NLT)
Empiezo a ver las necesidades de otros, simpatizo con su dolor, aprovecho las oportunidades para ser bondadoso y pago lo que cueste. Siempre cuesta ser bondadoso. Siempre hay un precio. La bondad hace que inevitablemente sacrifique su tiempo o su energía o su reputación o algo. A veces hasta su privacidad. Ser bondadoso tiene su precio. ¿Qué ganó él con esto? Nada. El ni siquiera conocía a la víctima. Era un total desconocido. El no ganó nada del herido. La bondad es cuando hace algo por alguien sin esperar algo a cambio. Entonces, ¿por qué ser bondadoso? ¿Por qué ser bondadoso si la gente nunca va a pagarme? Hice un estudio de esta pregunta esta semana y leí cada versículo acerca de la bondad en la Biblia. Hice una lista de las muchas, muchas razones por qué la Biblia dice que debe de ser bondadoso y sus beneficios. Permita que le dé rapidito cuatro o cinco. Debo ser bondadoso porque...
• Dios ha sido bondadoso conmigo. Y por si no lo sabía, no fue un favor minúsculo, no fue un favor casual. Es una bondad extravagante la que Dios le ha mostrado.
• La Biblia dice que la bondad es un acto de adoración.
• La Biblia dice la bondad honra a Dios.
• La Biblia dice la bondad le hace feliz. De hecho, la Biblia dice la bondad le hace atractivo. Proverbios 19:22 (Living Bible) “La bondad hace atractivo a un hombre”. ¡Hay esperanza para nosotros los hombres! ¡Usted podría ser un Brad Pitt espiritual! Solo empiece a ser bondadoso.
• La Biblia dice que la bondad hace que otra gente quiera ser amable con usted.
• La Biblia dice que Dios bendice la bondad. De hecho, repetidamente una y otra vez en las Escrituras, Dios dice, “Yo te recompensaré por cualquier bondad que hagas a otros.”
CONCLUSION: La bondad es el amor en acción, pero cuando debemos de ser bondadosos hacia otros, tomamos una de tres actitudes. Hay tres caracteres en la historia del Buen Samaritano (Lucas 10:30-35) que representan estas maneras de pensar.
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“Mantengo mi distancia” – Como el sacerdote en los versículos 30-31, escogemos no envolvernos, permanecemos al otro lado del camino.
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“Curioso pero sin involucrarme” – Como el levita en el versículo 32, miramos el problema pero seguimos nuestro camino. Somos curiosos, como aquellos que se detienen a ver accidentes de carretera pero no lo suficiente para ayudar.
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“Trato a otros a como quiero que me traten” – O podemos ser como el Buen Samaritano, que vio el problema e hizo lo que pudo para ayudar (versículos 33-35)
Aunque no sabemos su nombre, el Buen Samaritano es tan famoso que hay más hospitales nombrados en su memoria que nadie en el mundo. Aún el presidente Bush se refirió a él en su discurso inaugural. El samaritano practicó el estilo de vida de la bondad. Si queremos crecer en el amor, necesitamos hacer eso también.
Hay muchas oportunidades de expresar lo que todo pudieran hacerlo y no se animan. Animese usted y practique el amor en su familia, en su lugar de trabajo, en su vecindario, y en su comunidad.
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